El local de Farmacia Burgueño poseía fachada a dos calles opuestas, pero sólo una entrada y no accesible.
El proyecto de reforma consistió en lograr que toda la farmacia fuese accesible desde una de las calles y sólo dejar con escaleras el vestíbulo no accesible. De esta forma, todo el local es accesible para cualquier tipo de usuario.
Diseño atemporal, fuera de las modas actuales en locales de farmacias, y materiales nobles. Como maderas naturales, granitos, mármol y metal y vidrio en las estanterías hechas a medida.
En las fachadas granito y acero corten.